
En esta foto (tomada hace alrededor de tres meses y aunque ya había sol, todavía los días eran fríos, típicos de la primavera holandesa) Juanita Pérez descansa después de un largo paseo por algunas calles y avenidas de la ciudad portuaria junto al río Maas, Róterdam.
Ella luce una falda azul con aplicaciones también de ese color, aunque ya se la puso para ir a Scheveningen (pero el fin último de la misma es formar parte de un conjunto que se basa en los colores de mi universidad, no obstante, esa es otra historia y será tema de otra entrada).
Desde hace días ella espera, con "impaciencia contenida", es decir, algo, en realidad casi nada de paciencia, la llegada de la Juanita Pérez versión 2009, que por fin está en el país, aunque en otra zona de la ciudad.
Nuestro amigo holandés, Serge, aún no ha venido a cenar a casa y a traernos el montón de regalos que me han enviado mis familiares en la Ciudad de México, entre los cuales se encuentra la J. P. 2009, parace clave de algo mecánico, jajaja!
Por tal motivo, Juanita decidió mostrar esta foto en la cual aparece recostada tranquilamente en los brazos de una estatua un tanto descuidada, pero interesante en una preciosa callecita peatonal llamada Museumstraat o Calle del museo, sin embargo, resulta curioso que el Boijnmas van Beuningen Museum se encuentre en otra zona citadina, así como también el Maritiem Museum Rotterdam está lejos de este sitio.
La espera desespera, pero Juanita me tiene muy ocupada con el tejido de otros conjuntos y si da tiempo alguna bolsita para la nueva niña que vendrá a residir con nosotros.