

"Bright Star", soneto que da nombre a la más reciente película de la neozelandesa, antropóloga, guionista y directora de cine, Jane Campion.
Esta obra fílmica narra los tres últimos años del gran poeta romántico, de la segunda generación de tales literatos ingleses, John Keats y su inmenso amor imposible por Frances, Fanny, Brawne.
Este idilio se vio obstaculizado por convenciones sociales, amistades celosas, problemas económicos y finalmente, por la tuberculosis, enfermedad que en esa época era por completo terminal y que acabó con la madre y con uno de los dos hermanos del poeta, antes de provocarle a él mismo la muerte, a los 25 años de edad.
Campion logra un ritmo pausado, detenido, maravilloso, que transcurre con silencios cuya importancia es igual a las palabras, estas dos características contrastan con el cine comercial hollywoodense, en el cual no hay un solo instante de reflexión, sin embargo, aquí se sigue una línea sutil de cinefotografía casi pictórica, poética y tarkovskiana, llena de detalles casi palpables de tonalidades y texturas con imágenes y sonidos en perfecta armonía.
Una obra maestra de la cinematografía de la autora.
Recomiendo también otras películas de la misma directora:
The Piano (1993), The Portrait of a Lady (1996), Holy Smoke! (1999) y de este año, el filme tema de la presente entrada.